::: LA RUTA DE TAPEO :::.

Rutas Gastronómicas por Aragón 6ª Parte":

Zaragoza-Oliver-Valdefierro: El barrio Oliver fue conocido durante mucho tiempo como el "barrio del cura", ya que hacia 1915 mosén Oliver parceló terrenos de su propiedad, vendiendo luego el suelo a precios populares. En la actualidad muchos de los habitantes del barrio son aragoneses aunque hay un alto porcentaje de inmigrantes, procedentes en su mayoría de Andalucía. Está formado por dos núcleos que pueden considerarse sub-barrios: Oliver propiamente dicho, y la Camisera. Las calles del barrio son, en general, estrechas con un plano sensiblemente ortogonal. Esto hace que su protección frente a los agentes climáticos sea nula.

La Zarza:Dirigido por dos buenos cocineros -Miguel y Adolfo Guiral-, La Zarza ofrece una gran variedad de tapas revisadas. Galardonado con el premio a la tapa aragonesa en la última edición del concurso tapero de Zaragoza con el ravioli de pan con huevo de codorniz, borraja crujiente, morrón y chupa-chup de codorniz. Novedad en toda regla por la concepción de sus elaboraciones entre las que sobresalen de igual forma las servidas en simpáticas sartenes. Dominio de la sidra como bebida de acompañamiento.
ESPECIALIDAD: Con el ravioli de pan con huevo de codorniz, borraja crujiente, morrón y chupa-chup de codorniz.

Zaragoza-Torrero-La Paz: Existen dos interpretaciones acerca del origen del nombre de Torrero. Una se asocia a la abundancia de torres, antiguas casas de labranza, que cubrían el paseo Sagasta y Cuéllar y la otra se refiere al nombre de una ilustre familia procedente de Luna que trasladó su residencia a Zaragoza. La construcción del cementerio en 1834 trajo los primeros núcleos de población. A comienzos del siglo XX la incipiente vida de esta zona se desarrollaba alrededor de las canteras de yeso, situadas más allá del cementerio, de las que bajaba un trenecillo que transportaba las piedras por el camino de Cuarte hasta la fábrica de yesos. De ahí el nombre de la única plaza que ha tenido Venecia, la de las Canteras. Las primeras edificaciones del barrio eran parideras para el ganado que bajaba del Pirineo hacia Teruel.

La Bodega del Tío Jorge:Una colorida barra repleta de deliciosas mini-propuestas y un amplio listado de vinos forman el santo y seña del establecimiento de Ana Igarza y Julio Cortés. Especialistas en fritos, todos ellos caseros, huevo con angulas, mariscos de todo tipo y, sobre todo, la tapa del confit de pato que les otorgó en 2001 el premio a la mejor tapa en Zaragoza.Posee un pequeño comedor donde se sirven platos y sugerencias a precios más que ajustados. Sorpresa agradable en Torrero.
ESPECIALIDAD: Especialistas en fritos, todos ellos caseros, huevo con angulas.

Margen Izquierda de Zaragoza: La Margen Izquierda (engloba la avenida Cataluña, San Juan de la Peña, Cogullada, los barrios del Actur, Arrabal, Vadorrey, Jesús y La Jota) no perdió su aspecto rural hasta la llegada del ferrocarril en la segunda mitad del siglo XIX, por una razón obvia. El Ebro ha sido una barrera urbanística importante al norte del casco antiguo de la ciudad. Además, la escasa elevación de la Margen Izquierda con respecto al río provocó que a veces ésta se convirtiera en un cauce alternativo.

Sentinel:Agradablemente decorado y un tanto alejado de las arterias principales del Actur, el Sentinel ofrece al cliente unas elaboraciones muy variadas que van desde diferentes montaditos, donde el camenbert con sobrasada lleva el bastón de mando, hasta raciones de cocina donde los gratinados y rellenos se hacen con verduras sabiamente escogidas. Este local dispone además de una amplia terraza. Llama la atención las buenas formas en el tiraje de cerveza.
ESPECIALIDAD: Donde el camenbert con sobrasada lleva el bastón de mando.

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